El antecedente del Lobo en 2002
El vergonzoso episodio en la previa del River-Boca recuerda a los incidentes anteriores a un Gimnasia-Bolívar por la Copa Sudamericana 2002, cuando el micro de los bolivianos fue apedreado rumbo al Bosque y su arquero lesionado en un ojo.
Los graves incidentes en la previa de la revancha entre River y Boca por la final de la Copa Libertadores, con hinchas locales agrediendo el micro del equipo visitante, tienen un antecedente en la Sudamericana 2002, que involucra a Gimnasia y Esgrima La Plata.
En aquella edición del torneo, la primera, el Lobo había caído por 4 a 1 ante Bolívar en la ida de los cuartos de final y tenía que ganar por tres goles para forzar los penales. En la vuelta, el transporte del conjunto boliviano fue apedreado cuando estaba rumbo al estadio del Bosque y terminó con vidrios rotos y lesiones en los ocupantes del mismo.
Héctor Domínguez, por entonces presidente Tripero, le aseguró a su par Celeste que estaban las garantías de seguridad necesarias para salir a jugar. Más tarde, sería el propio presidente de Bolívar quien obligaría a sus jugadores a disputar el partido, a pesar de las lesiones sufridas por su delegación.
Finalmente, con al presión de la Conmebol mediante, los de La Paz salieron a la cancha sin arquero suplente: el titular, José Carlo Fernández, terminó con un ojo afectado (al igual que Pablo Pérez el pasado sábado) y debió ser reemplazado por su sustituto Mauro Machado, quien dejó vacante el que iba a ser su asiento en el banco.
Aquella noche, Gimnasia ganó 2-0, con goles de Víctor Müller, pero no le alcanzó para acceder a las semifinales, instancia en la que los bolivianos caerían ante San Lorenzo, futuro ganador de la Copa.
