“Para mi viejo hasta ahora no jugué un partido bien”
-Le dijiste a Ferrari que te robó el gol? -No, no le dije nada, je. El me carga con que lo hizo él y me mato de risa. Me importa que sirvió para ganar los tres puntos y que fue un muy lindo gol.
-¿Lo volviste a ver? -Sí, ¡un montón de veces! En la cancha no me había dado cuenta de que habían sido tantos toques o de que la pelota venía desde Carrizo. Impresionante.
-Si no la picás, ¿tus goles no valen? Con Colón y Huracán también habías definido igual.
-Lo que pasa es que hasta ahora se me dio porque los arqueros me salen rápido y me tiran el cuerpo encima (abre los brazos imitándolos). Y si le pego fuerte, por ahí me la sacan.
-¿Es tu forma de definir o depende de la jugada? -No, es el momento. Hasta ahora me tocó definir así. Hago lo que me sale, es un segundo… A veces pateo fuerte, pero cuando estoy mano a mano trato de asegurarla un poco más.
-¿Cuál te gustó más: el que hiciste de rabona en Inferiores o éste que te robó Ferrari? -Este fue lindísimo pero el de rabona me gustó mucho porque le ganamos a Gimnasia y fuimos campeones. ¡No me lo olvido más! -En el 2009 Gorosito te llevó a tu primera pretemporada, pero después no tuviste continuidad. ¿Cómo te sentiste al no tener chances? -Hace un año estaba mal, mal de la cabeza. Veía que pasaba el tiempo y que a mí no me tocaba.
-¿Dudaste cuando por caso veías ya afianzado al Keko, que es de tu categoría, y vos afuera? -No. Sé que cada uno tiene su tiempo. Lo importante es, cuando te toca, tratar de quedarte para siempre. Y eso es lo que yo busqué. No jugar un partido y después tener que volver enseguida a la Reserva.
-¿Qué sentiste cuando te dijeron que ibas a usar la 10 de River? -Me dio mucha alegría. Y me hizo sentir que tienen confianza en mí. La primera que usé fue para mi viejo y la segunda, para mi vieja. O al revés, no me acuerdo, pero fueron para ellos. Las tienen bien guardadas.
-¿Sentís más responsabilidad por llevarla? -No. Somos todos responsables. Aunque sé que ahora, para la gente, soy más responsable. Y si no hacemos goles, además de al Tanque, me los van a pedir a mí…
-¿Tu vida cambió mucho desde que la usás? -Sí, cambió. Igual, casi ni salgo de mi casa. Salgo sólo para comprar algo, pero no ando caminando por la calle casi nunca.
-A ver a Colegiales vas…
-Sí, voy a ver a Cole, pero tranquilo, a la platea. Aparte, como voy desde chico, la mayoría me conoce y no me joden mucho.
-En cuanto a tu exposición, ¿te gusta que te pidan fotos y autógrafos o todavía tenés timidez? -Timidez no, pero sí cuando estoy en un shopping y me miran, me molesta un poco. Igual, trato de no salir demasiado los días que hay mucha gente. Un viernes o un sábado no voy a un shopping…
-¿Qué le falta mejorar al 10 del River puntero? -La marca, el retroceso y la posición que te dicen que debés ocupar cuando no tenemos la pelota.
-¿Eso te falta potenciar o no te gusta hacerlo? -No, no, me gusta. El domingo no jugué tan bien, pero me fui tranquilo porque me sentí útil para el equipo, jugué para el equipo. No pude crear tanto en el segundo tiempo, pero ayudé a marcar y eso sirvió para ganar. Estamos todos muy metidos y todos somos solidarios adentro de la cancha.
-¿Preferís jugar como único enganche o así? -Como jugamos ahora estamos bien, adaptados, y está bueno porque no tenemos un sector fijo. En el gol a Quilmes yo aparecí por el otro lado y el Enano, en la otra punta.
-¿Te arrepentiste de aquella foto después de la patada de Curbelo? -Sí, me arrepentí porque fue una boludez. Fue una patada más, justo se dio que el arbitraje no nos favoreció y el jefe de prensa me dijo que me vaya a sacar la foto…
-No sos de quejarte como para hacer algo así.
-No soy de protestar. Cuando me pegan, no les digo nada a los rivales ni a los árbitros. Pero me sirvió de experiencia para que no me vuelva a pasar.
-¿Disfrutás de esta foto, la de ser parte de River? -Sí, disfruto de jugar en River, de salir a la cancha y ver a la gente que está siempre, llena todo y te transmite unas ganas terribles de jugar.
-¿Te incomoda el tema del promedio? -No. El objetivo es sumar puntos, la mayor cantidad, y después tratar de entrar a alguna copa. Falta mucho, pero ahora estamos ahí de la Sudamericana. Vamos bien. Veremos más adelante para qué estamos. Si volvemos para atrás o, quién te dice, estamos mejor y al final podemos pelear el torneo.
-¿Sos de ver o preguntar cómo salen Olimpo, All Boys, Huracán, Tigre…? -Hasta hace unos partidos, miraba. Ahora ya no.
-¿Están más tranquilos con ese tema? -Sí, ya miro un poco menos los promedios.
-¿Y te ilusionás al verte arriba en la tabla? -Sí, imposible no hacerlo.
-Siempre decís que quisieras salir campeón antes de irte…
-Ojalá podamos ganar el campeonato, pero no nos olvidamos de que primero tenemos otra meta. Vamos de a poco. Hay que seguir con humildad y trabajando como hasta ahora.
-¿Qué pensás cuando se nombran tantos clubes que te quieren para que te vayas en julio? -No le presto mucha atención. Se habla mucho de eso, pero yo me siento bien acá. River me da todo, lo que quiero lo tengo, me siento cómodo en el equipo, me llevo bien con mis compañeros y por el momento no pienso en irme.
-Admirás a Messi. ¿Creés que tenés algo de él en tu juego? -No, nada. Que soy zurdo, je, nada más.
-¿Lo usás cuando jugás a la PlayStation? -No, con el Barcelona tenés mucho afano. Elijo al Inter o al Manchester porque tienen buenas defensas y buenos jugadores para atacar. Y siempre los paro con un 4-3-1-2.
-¿Nunca elegís a River para jugar? -Me gustaría, pero si elegís un equipo de Argentina te ganan por robo. No son buenos.
-¿Y cómo es el Lamela de la Play? -Estoy en el plantel, pero soy malísimo, je.
-¿Por qué? ¿Cómo te hicieron? -Y, lento… y muy malo, ja, ja. Patea y se van a cualquier lado.
-¿Quiénes más se enganchan a jugar en la concentración? -El Enano, Lanzini, el Tanque también jugaba, el Indio Vega, Carri, un montón… Aunque ahora no estamos jugando tan seguido porque hay que usar el LCD grande que está en el living y si lo ocupamos, dejamos a todos sin tele.
-¿Y con tus amigos cuánto tiempo jugás? -Je, a veces nos encerramos y nos damos duro.
-¿Esa reunión es una fija de todas las tardes? -Más o menos. Fija es la siesta, a full. Después, casi siempre estoy con mi novia o con mis amigos. Uno es de Villa Adelina, otro de Boulogne y algunos del colegio, viven por Núñez. Ando por ahí, nos juntamos a comer seguido.
-¿Es cierto que a tu novia la hiciste de River? -Sí, pero ella no era de ningún club, así que no costó mucho. Es de River porque juego yo, pero no sabe nada de fútbol.
-¿Vivís solo o todavía seguís con tus viejos? -Con mis viejos y mis dos hermanos. Tengo ganas de irme a vivir solo, pero quizá me arrepienta. Soy muy chico todavía, tal vez dentro de dos años. Ahí sí, seguro. Pero por ahora quiero seguir viviendo con mi familia un tiempo más.
-¿Te preparan una dieta especial para las comidas? El cuerpo técnico siempre destaca que, en ese sentido, te comportás como un profesional a pesar de ser pibe.
-Como lo que hay, lo que me cocinan, aunque trato de cuidarme. Evito las hamburguesas, los panchos, las frituras. Si es al horno, mejor.
-¿Siempre fuiste de cuidarte en esas cosas? -No, más o menos. Desde que llegué a Primera empecé a comportarme de otra manera y a notar las diferencias. También por el tema del descanso, por ejemplo. Yo antes no dormía siesta. Ahora sí y me siento re descansado.
-¿Quién te aconseja? -Mi viejo, pero el que toma las decisiones soy yo. Ojo, no me dice adónde tengo que salir y esas cosas porque no soy de salir mucho. Si mi viejo supiera que estoy de joda, enseguida me diría algo. Pero no le doy motivos para eso.
-¿Y en lo futbolístico te critica? -Sí, ahí sí. Siempre, desde chico, me da su opinión. Es más: para él hasta ahora nunca jugué un partido bien. Y si hago un gol, él quiere dos, je…
http://www.ole.com.ar/river-plate/titulo_0_458354187.html