Papel Prensa S.A.

Hay más papeles secretos sobre Papel Prensa

                                                    Por 
                 Daniel Cecchini y Eduardo Anguita        
     

                                    [EMAIL="politica@miradasalsur.com"]politica@miradasalsur.com[/EMAIL]        
     


                                   En abril de 1977, el general Oscar Gallino se reunía  con los dueños de Clarín, La Nación y La Razón antes de interrogar en  el Pozo de Banfield a Lidia Papaleo de Graiver        

En abril de 1977, el general Oscar Bartolomé Gallino fue el instructor de los consejos de Guerra a los que la dictadura cívico-militar sometió a los herederos, socios y empleados de David Graiver, titular de las acciones mayoritarias de Papel Prensa. A dos días de la presentación por parte de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner del informe Papel Prensa - La Verdad, Miradas al Sur está en condiciones de afirmar que Gallino, un hombre de extrema confianza del dictador Jorge Videla (quien brindó con champagne con Ernestina Herrera de Noble cuando se inauguró la planta de la empresa en San Pedro), se reunió en por lo menos tres ocasiones con los propietarios de Clarín, La Nación y La Razón pocas horas antes de someter a interrogatorio a Lidia Papaleo, viuda de Graiver, y otros integrantes del grupo Graiver en el centro clandestino de detención conocido como Pozo de Banfield. Todos estos detenidos llevaban semanas de ser sometidos a torturas en el escabroso Puesto Vasco, donde el jefe de los torturadores era nada menos que el temible jefe de la Policía Bonaerense, el entonces coronel Ramón Camps.
La primera de esas jornadas –que tenía la modalidad de primero hablar con quienes ya se habían apropiado de Papel Prensa y luego con los humillados y despojados verdaderos propietarios– contó con la participación de los dueños de Clarín, La Nación y La Razón. La segunda vez, Gallino se encontró con los representantes legales de los tres medios y el secretario de Industria de la dictadura, mientras que la tercera vez fue con propietarios y representantes legales juntos. Estos encuentros tuvieron lugar entre el 9 y el 15 de abril de 1977 y cabe consignar que Lidia Papaleo había sido sometida a brutales torturas y violaciones hasta ser sentada frente a Gallino. La hipocresía de que aquel régimen brutal era una dictadura exclusiva de uniformados queda desbaratada ante la complicidad abierta que revelan estas reuniones, donde la sangre y las acciones de la empresa eran parte de una misma coctelera. Basta mirar las ediciones de esos tres diarios por esos días para verificar el entusiasmo con que los artículos de La Nación, Clarín y La Razón apoyaban al Estado terrorista.
Al gallinero. Gallino era un oficial de Inteligencia y uno de sus antecedentes fue haber comandado la brutal represión al Batallón 601 Domingo Viejobueno, donde un centenar de militantes del ERP murieron tras haber sido entregados por un agente infiltrado. Para ver la importancia que tenía, basta mencionar que cuando el general Roberto Viola asumió la presidencia, Gallino fue gobernador bonaerense.
La actual situación legal de Gallino es, por estas horas, muy interesante. Hace un año y medio que la Fiscalía Federal de Delitos de Lesa Humanidad de La Plata pidió su captura por su participación en el centro clandestino Puesto Vasco. Hace un mes y medio, la misma fiscalía le agregó otro pedido de captura, esta vez por su accionar en el Pozo de Banfield. Hasta el momento, ningún juez federal dio curso a estos pedidos.
Cuando Gallino se siente en el banquillo de acusados, deberá hacerlo ante el titular del Juzgado en lo Criminal y Correccional número 3 de esa ciudad, Arnaldo Corazza.
La fiscalía podrá preguntarle entonces a Gallino sobre la existencia de memos secretos, rubricados con su firma, donde constarían esas reuniones, así como otras mantenidas, en esos mismos días y antes de interrogar a los detenidos, con el jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, Ramón Camps. “Se trataría de una suerte de agenda o partes diarios de carácter secreto, relacionados con la instrucción de los consejos de guerra a los que fueron sometidos los Graiver”, dijo a Miradas al Sur una fuente de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, querellante en la causa. Esos memos habrían permanecido durante años guardados en un viejo edificio perteneciente al Ejército, ubicado en Carlos Pellegrini y Juncal. Vueltas de la historia, ese palacio fue ahora restaurado para ser la sede de Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), cuyo secretario general es Néstor Kirchner.
Testimonios de ayer y de hoy. Mientras tanto, la instrucción de la causa “Secretaría de DD.HH. de la Nación s/denuncia” –que investiga la utilización del terrorismo de Estado contra integrantes del Grupo Graiver– avanza en la Fiscalía Federal para delitos de lesa humanidad de La Plata, a cargo de Hernán Schapiro y Marcelo Molina. Además del pedido de detención de Gallino, los instructores ya tomaron declaración a Osvaldo Papaleo –hermano de Lidia, la viuda de David Graiver– y a Rafael Ianover, testaferro de Graiver y vicepresidente de Papel Prensa, ambos secuestrados en la Operación Amigo, conducida por Ramón Camps y Miguel Etchecolatz. Fuentes de la querella señalaron a Miradas al Sur que las declaraciones de Ianover y Papaleo coinciden casi punto por punto con los testimonios que ambos brindaron en 1986. En los próximos meses se espera tomar declaración al resto de los secuestrados del Grupo Graiver en Puesto Vasco y el Pozo de Banfield que aún están con vida.
Miradas al Sur tuvo acceso a las declaraciones judiciales realizadas en 1986 por Lidia papaleo de Graiver, Rafael Ianover, Osvaldo Papaleo, y las empleadas Silva Fanjul y Lidia Gesualdi, entre otros integrantes de Empresas Graiver S.A. (Egasa) que estuvieron detenidos-desaparecidos en Puesto Vasco y el Pozo de Banfield. En aquella oportunidad, la viuda de Graiver relató su secuestro, el 14 de marzo de 1977. El registro judicial señala, en fojas 246: “Aproximadamente a las 21 horas golpearon la puerta, invocando pertenecer al Ejército Argentino, lo que hizo que se franqueara la entrada, ingresando varias personas de civil y armadas. Tras ser identificados todos los ocupantes, la dicente es esposada, junto con Lidia Gesualdi, la que es golpeada en ese momento. Inmediatamente se las conduce fuera del edificio advirtiendo que en un automóvil estacionado en la puerta se encontraba Silvia Fanjul. También son privadas de su libertad las demás personas que se encontraban en el departamento, a excepción de Bogany”. También describe las sesiones de tortura a las que fue sometida en Puesto Vasco: “Inmediatamente se la condujo a una suerte de cocina, se la desnudó, fue atada a un elástico de cama comenzándose la primera sesión de tortura mediante picana eléctrica. Aclara que le fue quitada la venda de los ojos cuando fue desnudada, por orden de su torturador, al cual entonces ve. Posteriormente –días después– se entera que se trataba del comisario inspector Alberto Rousse”, señala el expediente.
En aquella declaración, Lidia Papaleo no deja de consignar el interés de sus secuestradores por Papel Prensa. En fojas 247 está escrito: “Que también desea aclarar que en Puesto Vasco en ocasión de ser torturada se hallaba presente el comisario Etchecolatz. Que tanto en el Pozo de Banfield como en la Comisaría de Banfield concurrían Beto Cozzani, la Tota y Darío Rojas, quienes le preguntaban por Papel Prensa, y que junto con (Alfredo) Abuin manejaban (cambio a foja 248) la vinculación entre Papel Prensa y Egasa”.
De este mismo interés da cuenta Rafael Ianover en su declaración de 1986. Relata que fue secuestrado el 12 de abril de 1977 y llevado a Banfield. “Que recuerda que ello no le llamó la atención pues ya se encontraban detenidos los miembros de la familia Graiver” (fojas 221). “Que si bien no puede ver por estar vendado, lo hacen sentar en una silla, haciéndole escuchar marchas peronistas. Luego de un rato le quitan la venda y lo llevan a una habitación en la cual lo espera un señor vestido de civil que lo interrogó sobre su accionar en Papel Prensa S.A., quién era el presidente, cómo habían sido nombrados, etc.” (fojas 222). “Que el día siguiente lo vuelven a vendar y a atar las manos, lo meten en un coche en el asiento trasero, conduciéndolo al lugar donde había estado el día anterior con la diferencia que lo hacen subir por una escalera de caracol a dos pisos y lo introducen en una celda en la cual se encuentra solo por espacio de cuatro días, llegando al quinto día el general Gallino, designado preventor, quien lo interroga nuevamente respecto de Papel Prensa” (fojas 223).
Las declaraciones que hace casi 25 años realizaron ante la Justicia Federal los integrantes del Grupo Graiver derriban los argumentos del Grupo Clarín cuando sostiene que las acusaciones de haberse apropiado de Papel Prensa en complicidad con la dictadura son un “invento” o una “causa armada” por el Gobierno .

Hay más papeles secretos sobre Papel Prensa | Miradas al Sur

Hay más papeles secretos sobre Papel Prensa

                                                    Por 
                 Daniel Cecchini y Eduardo Anguita        
     

                                    [EMAIL="politica@miradasalsur.com"]politica@miradasalsur.com[/EMAIL]        
     


                                   En abril de 1977, el general Oscar Gallino se reunía  con los dueños de Clarín, La Nación y La Razón antes de interrogar en  el Pozo de Banfield a Lidia Papaleo de Graiver        

En abril de 1977, el general Oscar Bartolomé Gallino fue el instructor de los consejos de Guerra a los que la dictadura cívico-militar sometió a los herederos, socios y empleados de David Graiver, titular de las acciones mayoritarias de Papel Prensa. A dos días de la presentación por parte de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner del informe Papel Prensa - La Verdad, Miradas al Sur está en condiciones de afirmar que Gallino, un hombre de extrema confianza del dictador Jorge Videla (quien brindó con champagne con Ernestina Herrera de Noble cuando se inauguró la planta de la empresa en San Pedro), se reunió en por lo menos tres ocasiones con los propietarios de Clarín, La Nación y La Razón pocas horas antes de someter a interrogatorio a Lidia Papaleo, viuda de Graiver, y otros integrantes del grupo Graiver en el centro clandestino de detención conocido como Pozo de Banfield. Todos estos detenidos llevaban semanas de ser sometidos a torturas en el escabroso Puesto Vasco, donde el jefe de los torturadores era nada menos que el temible jefe de la Policía Bonaerense, el entonces coronel Ramón Camps.
La primera de esas jornadas –que tenía la modalidad de primero hablar con quienes ya se habían apropiado de Papel Prensa y luego con los humillados y despojados verdaderos propietarios– contó con la participación de los dueños de Clarín, La Nación y La Razón. La segunda vez, Gallino se encontró con los representantes legales de los tres medios y el secretario de Industria de la dictadura, mientras que la tercera vez fue con propietarios y representantes legales juntos. Estos encuentros tuvieron lugar entre el 9 y el 15 de abril de 1977 y cabe consignar que Lidia Papaleo había sido sometida a brutales torturas y violaciones hasta ser sentada frente a Gallino. La hipocresía de que aquel régimen brutal era una dictadura exclusiva de uniformados queda desbaratada ante la complicidad abierta que revelan estas reuniones, donde la sangre y las acciones de la empresa eran parte de una misma coctelera. Basta mirar las ediciones de esos tres diarios por esos días para verificar el entusiasmo con que los artículos de La Nación, Clarín y La Razón apoyaban al Estado terrorista.
Al gallinero. Gallino era un oficial de Inteligencia y uno de sus antecedentes fue haber comandado la brutal represión al Batallón 601 Domingo Viejobueno, donde un centenar de militantes del ERP murieron tras haber sido entregados por un agente infiltrado. Para ver la importancia que tenía, basta mencionar que cuando el general Roberto Viola asumió la presidencia, Gallino fue gobernador bonaerense.
La actual situación legal de Gallino es, por estas horas, muy interesante. Hace un año y medio que la Fiscalía Federal de Delitos de Lesa Humanidad de La Plata pidió su captura por su participación en el centro clandestino Puesto Vasco. Hace un mes y medio, la misma fiscalía le agregó otro pedido de captura, esta vez por su accionar en el Pozo de Banfield. Hasta el momento, ningún juez federal dio curso a estos pedidos.
Cuando Gallino se siente en el banquillo de acusados, deberá hacerlo ante el titular del Juzgado en lo Criminal y Correccional número 3 de esa ciudad, Arnaldo Corazza.
La fiscalía podrá preguntarle entonces a Gallino sobre la existencia de memos secretos, rubricados con su firma, donde constarían esas reuniones, así como otras mantenidas, en esos mismos días y antes de interrogar a los detenidos, con el jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, Ramón Camps. “Se trataría de una suerte de agenda o partes diarios de carácter secreto, relacionados con la instrucción de los consejos de guerra a los que fueron sometidos los Graiver”, dijo a Miradas al Sur una fuente de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, querellante en la causa. Esos memos habrían permanecido durante años guardados en un viejo edificio perteneciente al Ejército, ubicado en Carlos Pellegrini y Juncal. Vueltas de la historia, ese palacio fue ahora restaurado para ser la sede de Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), cuyo secretario general es Néstor Kirchner.
Testimonios de ayer y de hoy. Mientras tanto, la instrucción de la causa “Secretaría de DD.HH. de la Nación s/denuncia” –que investiga la utilización del terrorismo de Estado contra integrantes del Grupo Graiver– avanza en la Fiscalía Federal para delitos de lesa humanidad de La Plata, a cargo de Hernán Schapiro y Marcelo Molina. Además del pedido de detención de Gallino, los instructores ya tomaron declaración a Osvaldo Papaleo –hermano de Lidia, la viuda de David Graiver– y a Rafael Ianover, testaferro de Graiver y vicepresidente de Papel Prensa, ambos secuestrados en la Operación Amigo, conducida por Ramón Camps y Miguel Etchecolatz. Fuentes de la querella señalaron a Miradas al Sur que las declaraciones de Ianover y Papaleo coinciden casi punto por punto con los testimonios que ambos brindaron en 1986. En los próximos meses se espera tomar declaración al resto de los secuestrados del Grupo Graiver en Puesto Vasco y el Pozo de Banfield que aún están con vida.
Miradas al Sur tuvo acceso a las declaraciones judiciales realizadas en 1986 por Lidia papaleo de Graiver, Rafael Ianover, Osvaldo Papaleo, y las empleadas Silva Fanjul y Lidia Gesualdi, entre otros integrantes de Empresas Graiver S.A. (Egasa) que estuvieron detenidos-desaparecidos en Puesto Vasco y el Pozo de Banfield. En aquella oportunidad, la viuda de Graiver relató su secuestro, el 14 de marzo de 1977. El registro judicial señala, en fojas 246: “Aproximadamente a las 21 horas golpearon la puerta, invocando pertenecer al Ejército Argentino, lo que hizo que se franqueara la entrada, ingresando varias personas de civil y armadas. Tras ser identificados todos los ocupantes, la dicente es esposada, junto con Lidia Gesualdi, la que es golpeada en ese momento. Inmediatamente se las conduce fuera del edificio advirtiendo que en un automóvil estacionado en la puerta se encontraba Silvia Fanjul. También son privadas de su libertad las demás personas que se encontraban en el departamento, a excepción de Bogany”. También describe las sesiones de tortura a las que fue sometida en Puesto Vasco: “Inmediatamente se la condujo a una suerte de cocina, se la desnudó, fue atada a un elástico de cama comenzándose la primera sesión de tortura mediante picana eléctrica. Aclara que le fue quitada la venda de los ojos cuando fue desnudada, por orden de su torturador, al cual entonces ve. Posteriormente –días después– se entera que se trataba del comisario inspector Alberto Rousse”, señala el expediente.
En aquella declaración, Lidia Papaleo no deja de consignar el interés de sus secuestradores por Papel Prensa. En fojas 247 está escrito: “Que también desea aclarar que en Puesto Vasco en ocasión de ser torturada se hallaba presente el comisario Etchecolatz. Que tanto en el Pozo de Banfield como en la Comisaría de Banfield concurrían Beto Cozzani, la Tota y Darío Rojas, quienes le preguntaban por Papel Prensa, y que junto con (Alfredo) Abuin manejaban (cambio a foja 248) la vinculación entre Papel Prensa y Egasa”.
De este mismo interés da cuenta Rafael Ianover en su declaración de 1986. Relata que fue secuestrado el 12 de abril de 1977 y llevado a Banfield. “Que recuerda que ello no le llamó la atención pues ya se encontraban detenidos los miembros de la familia Graiver” (fojas 221). “Que si bien no puede ver por estar vendado, lo hacen sentar en una silla, haciéndole escuchar marchas peronistas. Luego de un rato le quitan la venda y lo llevan a una habitación en la cual lo espera un señor vestido de civil que lo interrogó sobre su accionar en Papel Prensa S.A., quién era el presidente, cómo habían sido nombrados, etc.” (fojas 222). “Que el día siguiente lo vuelven a vendar y a atar las manos, lo meten en un coche en el asiento trasero, conduciéndolo al lugar donde había estado el día anterior con la diferencia que lo hacen subir por una escalera de caracol a dos pisos y lo introducen en una celda en la cual se encuentra solo por espacio de cuatro días, llegando al quinto día el general Gallino, designado preventor, quien lo interroga nuevamente respecto de Papel Prensa” (fojas 223).
Las declaraciones que hace casi 25 años realizaron ante la Justicia Federal los integrantes del Grupo Graiver derriban los argumentos del Grupo Clarín cuando sostiene que las acusaciones de haberse apropiado de Papel Prensa en complicidad con la dictadura son un “invento” o una “causa armada” por el Gobierno .

Hay más papeles secretos sobre Papel Prensa | Miradas al Sur

Papel Prensa, otro triste capítulo en la historia de amor que existió entre la dictadura y Clarín. El monopolio de la hoja de papel, termina monopolizando las líneas editoriales, porque Clarín no cobra la hoja lo mismo a aquél que representa sus intereses como a aquél que no. Y el Estado, que supuestamente es socio, no puede acceder ni siquiera a conocer qué es lo que está ocurriendo ahí adentro. La hoja de papel debe valer lo mismo para todos, eso es lo que se busca, y eso es lo que no le gusta a Clarín.

Osvaldo Papaleo
“Clarín compró Papel Prensa con la familia Graiver secuestrada”


Para Osvaldo Papaleo, Clarín ha convertido a los medios de comunicación en la Argentina.
26-09-2009 / Cuenta cómo se hizo el traspaso de la planta de papel, mientras torturaban a sus antiguos dueños .
Por Felipe Deslarmes
politica@miradasalsur.com

Osvaldo Papaleo, hoy empresario teatral y cinematográfico, se volvió a meter de lleno en el escenario político tras su aparición en las audiencias públicas que se realizaron para debatir la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. El ex secretario de Prensa de la ex presidenta Estela Martínez de Perón, que fuera secuestrado y torturado durante la última dictadura, asegura que el monopolio creado por el Grupo Clarín comenzó a gestarse bajo el régimen comandado por Jorge Rafael Videla.

Papaleo detalló el modo por el cual Clarín, La Razón y La Nación se quedaron con Papel Presa, la piedra fundacional de un monopolio mediático que creció al amparo del poder de turno durante treinta años.

–Pese a su historia, a muchos les sorprendió su participación en las audiencias públicas.

–Mi participación en las audiencias públicas es natural. Pese a la sorpresa de algunos, tengo una larga militancia en el justicialismo discutiendo el tema de los medios de comunicación. Yo soy de la generación que en los años ’73, ’74, ’75 y hasta el golpe de Estado participó de la política sobre los medios de comunicación que el general Perón instrumentó en su retorno a la Argentina. Aquella política involucró el cese de las licencias televisivas de los canales de aire. En aquel entonces también se planteó el tema de la legislación y las normas. Allí tuvimos conciencia y tomamos medidas de transformación en los medios.

–¿La transferencia bajo el régimen de la dictadura de Papel Prensa a los diarios Clarín, La Nación
y La Razón es la piedra fundamental del monopolio comunicacional en la Argentina?

–Con respecto a Papel Prensa lo que hay que explicar es que era una sociedad que tenía la familia Graiver en un 75% y el Estado nacional en un 25%. Se había constituido a fines de la década del ’60. De a poco se fue transformando en una planta importante en la zona de San Pedro y Baradero, fundamentalmente por la explotación del papel nacional y por la producción, principalmente de papel para los diarios. Hasta ese entonces había una enorme cantidad de papel que se consumía y se tenía que importar, cuestión que era bastante onerosa para los medios gráficos nacionales. En marzo de 1977 fueron detenidos casi la totalidad de los miembros de la familia Graiver. El padre, la madre y la esposa de David Graiver, que había fallecido el 7 de agosto de 1976 en un accidente aéreo en México.

–¿Qué pasó dspués?

–Si bien Papel Prensa era uno de los activos más importantes de Graiver, no era éste su único negocio. Entre agosto del ’76 y marzo del ’77, cuando la familia estaba liquidando sus activos, recibió algún tipo de oferta por parte de Clarín, La Razón y La Nación para comprar Papel Prensa. De hecho, la tarde del día en que detienen a la mayoría de la familia, mi hermana, Lidia Papaleo de Graiver, asistió junto a Isidoro Graiver a una reunión con representantes legales y algunos miembros de los directorios de estas empresas para ver si se podía firmar una carta de intención para comprar la empresa. Esa noche son detenidos.

–Y a su vez se produce otra cadena de secuestros…

–Allí comienza otra actividad. La dictadura acciona contra el diario La Opinión, que dirigía Jacobo Timerman y del cual era propietario David Graiver. Así se iba desarrollando la política de los medios. A su vez, un tribunal de guerra condena a la familia Graiver en base a declaraciones arrancadas bajo tortura en el Pozo de Banfield y en el Puesto Vasco de Bernal. Yo también soy detenido y paso nueve meses en el Puesto Vasco. La familia Graiver es blanqueada, al igual que Jacobo Timerman. Pero la familia queda detenida. Yo salgo a los nueve meses y me voy del país.

–¿Cómo siguió el proceso judicial?

–A partir de allí empezamos a intentar que la familia Graiver fuera juzgada por la Justicia Civil y no por la Justicia Militar. Luego los Graiver fueron incluidos en lo que se llamó el “acta institucional”, donde había muchos dirigentes políticos, por ejemplo Lorenzo Miguel, Jorge Taiana, Carlos Menem, entre otros. El acta significaba que uno perdía los derechos civiles y económicos. Esto significa que todos los bienes de la familia pasaban a estar en manos de la Comisión Nacional para la Recuperación Patrimonial (Conarepa). Por lo tanto, el 75% de Papel Prensa pasa a estar en manos del Estado. A fines del ’78 se convoca a una asamblea para tratar el tema accionario de la empresa. En ese momento me reúno con el abogado de Clarín, Bernardo Sofovich, quien me advierte que se va a realizar una multiplicación de las acciones y la posterior cesión a Clarín, La Nación y La Razón. Con la multiplicación, las empresas se aseguraban la posición dominante por más que la familia Graiver recuperara sus acciones. De esa asamblea no pudimos participar, nos fue prohibido.

–Y ahí comienza a cerrar esa parte de la historia…

–Así Clarín compró Papel Prensa, con la familia Graiver detenida y juzgada por un tribunal de guerra de la dictadura. A partir de allí Clarín ejerció el monopolio de la venta de papel para diarios. Cuenta de esto dieron Julio Ramos (N. de R: Los cerrojos a la prensa), fundador de Ámbito Financiero, y Héctor Ricardo García, que durante muchos años fue dueño de Crónica.

–¿El proyecto de ley que se está discutiendo en el Congreso es una herramienta adecuada para limitar la concentración de los medios?

–Si bien la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual no incluye a los medios gráficos, me parece que ésta es una forma de limitar a Clarín y otros grupos que imitan a Clarín en la monopolización de los servicios. La estructura básica de Clarín se sustenta en el diario, después se le cedió un canal de televisión y a partir de allí hizo una cadena de comunicación impresionante en todo el país. Estamos ante la posibilidad de pegarle en el espinazo a un monopolio real, tanto de la información como de la conducta de la gente. Clarín, lo vemos en la defensa encendida de algunos actores, ha convertido a los medios de comunicación de la Argentina en una actividad empresaria sin ningún tipo de ética profesional.

Además, Clarín ha generado en el interior del país verdaderas cadenas que impiden la expresión libre de organizaciones, sectores empresarios, ONG y universidades. Este país está monopolizado por el Grupo Clarín, que cuenta con dos empresas de cable que tienen el 50 % de los abonados y con una red nacional impresionante. Esta ley abre ese camino. Si bien esta norma no habla de medios gráficos, es importante lo de Papel Prensa para entender quién habla de “ley mordaza”. Qué autoridad tiene para hacerlo cuando Clarín fue la gran mordaza de los medios gráficos durante los últimos 30 años.

–¿Por qué cree que cierta parte de la opinión pública no está convencida de que éste sea el camino correcto?

–Hay sectores políticos, como el radicalismo, que no comulgan con la ley. Esto me sorprende, por la historia del radicalismo que siempre ha abogado por la presencia del Estado en los medios. Ahora yo veo a diputados y senadores radicales utilizando un lenguaje liberal y no lo puedo creer. Pero hemos logrado cosas. Ahora sabemos quien es quien. Se ha blanqueado la situación. Por primera vez estamos hablando de lo que realmente ocurre. Por otra parte acá hay que generar una televisión por cable de calidad. Hoy los operadores de cables no generan trabajo, sino que son simples vendedores de espacios.

–¿Es acertado el momento político para llevar adelante la ley?

–Sí, es acertado. Este es el momento. Porque si no van a seguir eligiendo presidentes, ministros y van a seguir siendo una fuerte influencia en la política argentina. Entonces cualquier momento es el oportuno. Además, si se logra se va a dar un gran paso. Y no tenga dudas de que van a aparecer inversores privados que van a hacer televisión. No seamos pesimistas, no podemos creer que el único que tiene dinero para invertir en esto es Clarín. Ahora, hasta que no salga la ley del Senado, hay una realidad: la del debate, la del miedo. Pero una vez que la ley salga la realidad va a ser otra, yo sé de grupos empresarios que creen que los medios son una buena inversión. Por eso pongo un paréntesis hasta que la ley sea un hecho consumado, vamos a escuchar otro lenguaje, incluso de muchos que se mantuvieron ajenos a esta discusión. Además, esto que dicen, que en diciembre van a modificar la ley… Yo la verdad no creo que sea tan fácil. Primero, porque los diputados que entran no son un bloque. Y después, porque la relación con Clarín ya no va a ser la misma, ya no va ser una relación de patrón y empleado.

–¿Hay un paralelo histórico que se pueda trazar entre aquel gobierno del peronismo que se sostuvo enfrentado a la prensa y éste que encabeza Cristina Fernández?

–Sí, con este tema sí. Este gobierno no dio todos pasos felices en este tema, por ejemplo cuando se permitió la unidad entre Cablevisión y Multicanal. Por eso me causa gracia cuando la oposición plantea la necesidad de un largo debate sobre estos temas cuando ante aquel decreto nadie dijo “que venga al Parlamento”. Yo creo que el Gobierno ahora sí va a enfrentar algo parecido a aquello. Va a tener que enfrentar un violento ataque bajo métodos sutiles. La difusión violenta de los piquetes y todo lo que ha aparecido en el último tiempo. Todo esto tiene que ver. Siempre, hasta el más inocente defensor de una causa popular puede jugar para el enemigo.

http://www.elargentino.com/nota-59632-Clarin-compro-Papel-Prensa-con-la-familia-Graiver-secuestrada.html

Foto que saque en el Museo de River en el tunel en la decada correspondiente…asi la vendian…

El grupo clarin no se callo durante la dictadura,fue complice de la dictadura y Papel Prensa fue la recompensa.Lo mismo le cabe a La nacion.

Que triste historia y cuanto daño se le hizo a la prensa argentina con aquella burda y criminal maniobra gestada por un estado genocida y un empresariado corrupto y cómplice. Sin duda una de las páginas mas negras de la historia argentina.

Algun dia las hojas dejaran de seguir estando manchadas con sangre, como lo estan desde 1978.

No entiendo como todabìa Cristina no expropio P.P

no se si voy a ponerlo aca… pero esta parte de lanata es muuuy interesante, compartan o no…

//youtu.be/0saxBrUK398&feature=player_embedded

Ahora a las 19 hs. parece que Cristina va a presentar un informe sobre Papel Prensa… Bah, hoy en TN ya se estaban atajando.

PD: Después veo lo de Lanata, si fue lo que dijo ayer en su programa, no me gustó nada, y me sorprende para mal, realmente para mal, que haya puesto en duda el testimonio de Papaleo…

3 veces quise pegar la nota que sacaron Clarin y La Nacion y no pude:| asi que dejo el link
Una historia inventada para quedarse con Papel Prensa - lanacion.com

Es peligrosisimo que digan que todo es invento…

Ja, qué gracioso TN, todo el día atajándose sobre “el informe para avanzar sobre Clarín y Lanación, a las 19”, y a las 19 están pasando los resultados de la quiniela…

No habrá salido el 79 ( El Ladrón ) a la cabeza no? :twisted:

Ahi pusieron en tn, dejo ahi asi veo que graphs ponen:evil::evil::evil:

Ni comparto ni me parecio nada del otro mundo…

Es más, me suena al discurso de siempre pero más pausado y contras palbras…

Igual en algunas cosas lo banco al górdo…

Abrazo!.

La nota comienza diciendo:

“Los accionistas privados de Papel Prensa venimos denunciando desde hace casi un año un plan del gobierno nacional para apoderarse de la compañía y controlar el papel para diarios, insumo esencial de la prensa libre. Controlar el papel es controlar la información, y esto es lo que el Gobierno viene buscando a través de varias herramientas”.

Ergo, analizada contrario sensu podemos decir que Clarin sostiene que ellos controlan el papel para diarios, y si controlar el papel es controlar la informacion, es el propio grupo quien admite que controlan la informacion.

A confesion de parte…

La verdad, no sé qué puede llegar a pasar con esto. Hay pruebas, hay lesa humanidad, hay intereses… Da miedo la forma en que Clarín intenta negar todo y contraatacar al gobierno, (entrar en Clarín.com) ¿Qué van a hacer cuando se expida una Cámara de Apelaciones sobre el tema? ¿Van a salir como Macri, pero con la artillería pesada de todo el artículado mediático, a sembrar la desconfianza y el descrédito sobre la justicia y en general de las instituciones? ¿Qué aportan tipos como Lanata en un momento como este hablando de los medios afines al Gobierno, igualándolos al Grupo Clarín, poniendo en duda el testimonio de una mina violada y torturada por la dictadura?

Exacto, ellos mismos tratando de quemar al gob se auto escrachan.
Las cosas que escuche de este tema…han llegado a decir que Graiver NO esta muerto…TETRICO

Yo creo que hay demasiados intereses como para que esto prospere. Intereses ( económicos, políticos) no solo nacionales sino internacionales. La sociedad argentina se muestra en buena parte indiferente y eso ayuda poco. Me parece que esta es una batalla que el gobierno da solo contra demasiados intereses establecidos y monstruosos ( repito no solo nacionales sino internacionales ). Esos mismo intereses que a veces le digo a el presi que si Pino el día de mañana fuera gobierno se encargarían de ver como hacen para voltearlo en menos de 6 meses porque sus medidas atentarían sistemáticamente contra el corazón de ese poder. Hay un poder omnipresente contra el que es imposible emprenderla. Los mismos diarios que quizas se verían beneficiados si el día de mañana esto es manejado de manera apropiada, se callan la boca porque temen que no prospere y que le tengan que seguir comprando a Clarín y La Nación.

Estos son hechos fundacionales de un país. Si su sociedad no se compromete no hay forma que se avance. Un ejemplo es Fibertel. Si a una sociedad le da lo mismo que un servicio sea o no ilegal mientras le den el mejor y mas barato servicio da una muestra de lo que esa sociedad está dispuesta a jugar. Eso si después lo primero que sale a pedir esa misma sociedad es justicia. Una justicia que considera como tal solo si la beneficia.