genio y figura J.R.

Carrasco, intratable con sus jugadores: “Tenías toda la cancha para pegarle, pero claro, elegiste la tribuna”

El entrenador de River Plate de Uruguay, Juan Ramón Carrasco, montó un “show” imperdible durante el amistoso que jugara ayer su equipo frente a Tacuary.

Carrasco, con todo, en un amistoso

Al técnico no pareció importarle que se tratara de un amistoso, de tan sólo 50 minutos, y con no más de 600 personas como espectadores, según consigna hoy Ovación en su formato digital.
Y así, con mil revoluciones y al filo de la cancha, les dirigió a todos y a cada uno de sus dirigidos mil y una indicaciones. Algunas de ellas fueron realmente memorables.
“¿Ya empezamos? Lo hablamos, ¿no? Seguí que ya sabes lo que pasa”, cuando alguno de sus jugadores prefería la personal antes de un pase. Hasta llegó a lanzar, tras un remate desviado: “¿'Tas con los zapatos cambiados?”.
La prensa local se hizo un festín con el show de Carrasco. Vivió el partido parado, sentado, caminando, a los gritos, de brazos cruzados y hasta comiéndose las uñas.
Cuando su equipo atacaba parecía no tener filtro. “Dale, dale. ¡Ya! tres dedos” o “Encara, encará a ver qué hay”.
Igualmente, la mejor de todas, la tenía guardada para su delantero, quien supo perder un gol hecho dentro del área rival.
“Qué bárbaro… qué bárbaro… Tenías toda la cancha para pegarle a donde quisieras, pero claro, elegiste la tribuna”, disparó.
El partido no quedará en la historia, pero las frases de Carrasco seguramente se repetirán entre los hinchas de River.

Carrasco, intratable con sus jugadores: “Tenías toda la cancha para pegarle, pero claro, elegiste la tribuna”

El entrenador de River Plate de Uruguay, Juan Ramón Carrasco, montó un “show” imperdible durante el amistoso que jugara ayer su equipo frente a Tacuary.

Carrasco, con todo, en un amistoso

Al técnico no pareció importarle que se tratara de un amistoso, de tan sólo 50 minutos, y con no más de 600 personas como espectadores, según consigna hoy Ovación en su formato digital.
Y así, con mil revoluciones y al filo de la cancha, les dirigió a todos y a cada uno de sus dirigidos mil y una indicaciones. Algunas de ellas fueron realmente memorables.
“¿Ya empezamos? Lo hablamos, ¿no? Seguí que ya sabes lo que pasa”, cuando alguno de sus jugadores prefería la personal antes de un pase. Hasta llegó a lanzar, tras un remate desviado: “¿'Tas con los zapatos cambiados?”.
La prensa local se hizo un festín con el show de Carrasco. Vivió el partido parado, sentado, caminando, a los gritos, de brazos cruzados y hasta comiéndose las uñas.
Cuando su equipo atacaba parecía no tener filtro. “Dale, dale. ¡Ya! tres dedos” o “Encara, encará a ver qué hay”.
Igualmente, la mejor de todas, la tenía guardada para su delantero, quien supo perder un gol hecho dentro del área rival.
“Qué bárbaro… qué bárbaro… Tenías toda la cancha para pegarle a donde quisieras, pero claro, elegiste la tribuna”, disparó.
El partido no quedará en la historia, pero las frases de Carrasco seguramente se repetirán entre los hinchas de River.