Aníbal Fernandez

LOS BLOGGERS “K” AMAN AL JEFE

El nuevo ídolo de los chicos: Aníbal Fernández

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No son muchos los cuadros a los que el kirchnerismo puede festejar sin hacer un profundo borrón de trayectorias pasadas. Así convierte temporariamente en cuadros nacionales y populares a los ex UCEDÉ Sergio Massa y Aimee Boudou. Antes habían sido entre otros como el ex cavallista Alberto Fernández y Martín Redrado. Desde hace un tiempo ya se le festeja cada ocurrencia al actual jefe de gabinete Aníbal Fernández, quien ahora se reveló como referente de las jóvenes capas del kirchnerismo 2.0.

Hijo de un sargento del ejército, Fernández creció en la política quilmeña de la mano de Ángel Leonidas Abasto, un viejo caudillo de la derecha peronista del distrito que solía tomar café y mantener una cordial relación con el Almirante Emilio Eduardo Massera. Abasto fue concejal y más tarde diputado nacional. No parece ser un hombre que use internet cotidianamente. Perteneció a la Liga Federal que armó Eduardo Duhalde en la provincia junto a los mejores cuadros del peronismo conservador, por así decirlo. Con el retroceso del menemismo, la influencia de Abasto comenzó a declinar. A esa altura ya hacía rato que Fernández había tomado vuelo propio.

Del ´87 al `91, Aníbal fue el cajero de la Cámara de Senadores bonaerense, cargo que le permitió conocer como ninguno los usos y costumbres del laberíntico Partido Justicialista de la provincia. Abandonó más tarde esa tarea para tras ganar con el FREJUPE la intendencia de Quilmes, donde comenzó a mostrar su estilo rápido de lengua. Por entonces el bigotudo era un as para cantar loas al estado moderno y los servicios públicos privatizados y un duro defensor de las profundas transformaciones logradas por Carlos Menem, de quien hoy, confiesa, sigue sintiéndose amigo.

Se sabe, durante esa gestión, en octubre de 1994, estuvo prófugo de la justicia durante dos días a causa de un contrato del municipio con Aguas Argentinas, se escapó en el baúl de un auto. Ese mes, la policía había allanado el local de la Liga Federal que funcionaba en el ex Estadio Chico. La bonaerense secuestró medio kilo de cocaína de mediana pureza, una balanza y elementos para el fraccionamiento. La mercadería estaba ordenada en pequeñas bolsas plásticas. Desde ese caso hasta el reciente triple crimen y como buena parte del duhaldismo, Aníbal siempre fue vinculado al tráfico de drogas en la provincia. Uno de los últimos en hacerlo públicamente fue Guillermo Robledo, secretario de gobierno del actual intendente quilmeño Francisco Gutiérrez.

El bajo perfil y el respaldo del entonces gobernador Duhalde - cuya esposa Chiche contó que Fernández solía compartir la mesa familiar en Lomas - le permitió llegar al final del mandato en el distrito sureño sin mayores problemas. Enseguida renovó fueros al ser electo senador bonaerense. En 1997 y tras dos años de bajo perfil, Duhalde lo convocó nuevamente para un cargo ejecutivo: fue su Secretario de Gobierno. Pasó más tarde a la cartera laboral en la provincia, primero Secretaría y luego Ministerio, función en la que continuó con otro hombre de pura cepa lopezrregista al frente de la provincia: Carlos Ruckauf.

Eran los tiempos de meter bala a los delincuentes y Aníbal mostraba su capacidad para seguir ascendiendo: fue en ese período cuando Fernández se enfrentó a una movilización piquetera de los desocupados del Movimiento Teresa Rodríguez, entre ellos el dirigente varelense Roberto Martino. Aníbal los atendió, les prometió el oro y el moro. Los delegados salieron contentos, y en la esquina los esperaba una camioneta de la policía, palos, detención y causas para todos. Los blogs no pudieron reflejar la picardía, no existían todavía.

En 2002, cuando Eduardo Duhalde asumió la presidencia del país, Fernández volvió a ser su secretario y compartió gustoso el Gabinete con Alfredo Atanasof, Juan José Álvarez, Jorge Vanossi y Jorge Matzkin entre otros. Ese cargo ocupaba el 26 de junio de 2002 cuando el gobierno llevó a la práctica lo que venía anunciando desde hacia días. Una represión interminable, una cacería en la que los cartuchos de plomo de las escopetas de la bonaerense terminaron con la vida de Darío Santillán de 21 años y Maximiliano Kosteki de 20.

Según declaró en los tribunales de Lomas de Zamora, durante el juicio por la Masacre de Avellaneda, Fernández volvió al país unas horas después de los asesinatos y esa resulta ser una excusa suficiente para que todo el kirchnerismo lo ponga al margen de lo ocurrido.
Tal vez sea una buena explicación judicial, pero desde lo político el quilmeño nunca explicó que es lo que hizo antes y luego de los asesinatos. Más acá de lo que no sabemos, tenemos lo único comprobable, que es su silencio cómplice. Alguna vez y como parte de la campaña electoral de las legislativas de 2005, que en la provincia enfrentó a Cristina Kirchner con Hilda “Chiche” Duhalde, Fernández amenazó ante la prensa con contar “todo lo que sabía” respecto de aquella jornada de junio de 2002.

El pasado fin de semana Fernández cerró el encuentro “Bloggeros Nac & Pop”. ¿Se habrá acordado alguien de preguntarle allí al jefe de Gabinete que es lo que sabe y nunca contó?

Néstor Kirchner relacionó varias veces y en publico a aquel gobierno con las muertes. Quienes festejan hoy a Fernández le perdonan aquel silencio en base a su obsecuente y monolítico discurso de hoy. A favor del ex secretario, ex ministro y actual Jefe de Gabinete hay que decir que desarrolló una carrera en los más altos niveles del poder del estado en base a un acabado espíritu de autopreservación a prueba de todo. Quizás por eso despierta admiración entre los jóvenes K, varios de ellos ingresados en los últimos años al funcionariado, otros aspirantes y otros buenos aduladores.

Se festeja la dureza de la cara para borrarlo todo y seguir como si nada. Esas anibaladas del secretario de Duhalde festejan los jóvenes bloggers oficialistas, y algunos no tan jóvenes como Artemio López. Festejan los cuadros que les presta el neoliberalismo y el calorcito que tiran, se los festeja por izquierda, se les dicta. Se aplaude y venera a los únicos que saben y no dudan en hacerlo, aunque mañana salgan a matar bloggers para defender un puesto.

Prensa De Frente - El nuevo ídolo de los chicos: Aníbal Fernández

Me gustó esta columna así que decidí compartirla… como verán la fuente no es Clarín, ni Perfil, ni La Nación…

LOS BLOGGERS “K” AMAN AL JEFE

El nuevo ídolo de los chicos: Aníbal Fernández

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No son muchos los cuadros a los que el kirchnerismo puede festejar sin hacer un profundo borrón de trayectorias pasadas. Así convierte temporariamente en cuadros nacionales y populares a los ex UCEDÉ Sergio Massa y Aimee Boudou. Antes habían sido entre otros como el ex cavallista Alberto Fernández y Martín Redrado. Desde hace un tiempo ya se le festeja cada ocurrencia al actual jefe de gabinete Aníbal Fernández, quien ahora se reveló como referente de las jóvenes capas del kirchnerismo 2.0.

Hijo de un sargento del ejército, Fernández creció en la política quilmeña de la mano de Ángel Leonidas Abasto, un viejo caudillo de la derecha peronista del distrito que solía tomar café y mantener una cordial relación con el Almirante Emilio Eduardo Massera. Abasto fue concejal y más tarde diputado nacional. No parece ser un hombre que use internet cotidianamente. Perteneció a la Liga Federal que armó Eduardo Duhalde en la provincia junto a los mejores cuadros del peronismo conservador, por así decirlo. Con el retroceso del menemismo, la influencia de Abasto comenzó a declinar. A esa altura ya hacía rato que Fernández había tomado vuelo propio.

Del ´87 al `91, Aníbal fue el cajero de la Cámara de Senadores bonaerense, cargo que le permitió conocer como ninguno los usos y costumbres del laberíntico Partido Justicialista de la provincia. Abandonó más tarde esa tarea para tras ganar con el FREJUPE la intendencia de Quilmes, donde comenzó a mostrar su estilo rápido de lengua. Por entonces el bigotudo era un as para cantar loas al estado moderno y los servicios públicos privatizados y un duro defensor de las profundas transformaciones logradas por Carlos Menem, de quien hoy, confiesa, sigue sintiéndose amigo.

Se sabe, durante esa gestión, en octubre de 1994, estuvo prófugo de la justicia durante dos días a causa de un contrato del municipio con Aguas Argentinas, se escapó en el baúl de un auto. Ese mes, la policía había allanado el local de la Liga Federal que funcionaba en el ex Estadio Chico. La bonaerense secuestró medio kilo de cocaína de mediana pureza, una balanza y elementos para el fraccionamiento. La mercadería estaba ordenada en pequeñas bolsas plásticas. Desde ese caso hasta el reciente triple crimen y como buena parte del duhaldismo, Aníbal siempre fue vinculado al tráfico de drogas en la provincia. Uno de los últimos en hacerlo públicamente fue Guillermo Robledo, secretario de gobierno del actual intendente quilmeño Francisco Gutiérrez.

El bajo perfil y el respaldo del entonces gobernador Duhalde - cuya esposa Chiche contó que Fernández solía compartir la mesa familiar en Lomas - le permitió llegar al final del mandato en el distrito sureño sin mayores problemas. Enseguida renovó fueros al ser electo senador bonaerense. En 1997 y tras dos años de bajo perfil, Duhalde lo convocó nuevamente para un cargo ejecutivo: fue su Secretario de Gobierno. Pasó más tarde a la cartera laboral en la provincia, primero Secretaría y luego Ministerio, función en la que continuó con otro hombre de pura cepa lopezrregista al frente de la provincia: Carlos Ruckauf.

Eran los tiempos de meter bala a los delincuentes y Aníbal mostraba su capacidad para seguir ascendiendo: fue en ese período cuando Fernández se enfrentó a una movilización piquetera de los desocupados del Movimiento Teresa Rodríguez, entre ellos el dirigente varelense Roberto Martino. Aníbal los atendió, les prometió el oro y el moro. Los delegados salieron contentos, y en la esquina los esperaba una camioneta de la policía, palos, detención y causas para todos. Los blogs no pudieron reflejar la picardía, no existían todavía.

En 2002, cuando Eduardo Duhalde asumió la presidencia del país, Fernández volvió a ser su secretario y compartió gustoso el Gabinete con Alfredo Atanasof, Juan José Álvarez, Jorge Vanossi y Jorge Matzkin entre otros. Ese cargo ocupaba el 26 de junio de 2002 cuando el gobierno llevó a la práctica lo que venía anunciando desde hacia días. Una represión interminable, una cacería en la que los cartuchos de plomo de las escopetas de la bonaerense terminaron con la vida de Darío Santillán de 21 años y Maximiliano Kosteki de 20.

Según declaró en los tribunales de Lomas de Zamora, durante el juicio por la Masacre de Avellaneda, Fernández volvió al país unas horas después de los asesinatos y esa resulta ser una excusa suficiente para que todo el kirchnerismo lo ponga al margen de lo ocurrido.
Tal vez sea una buena explicación judicial, pero desde lo político el quilmeño nunca explicó que es lo que hizo antes y luego de los asesinatos. Más acá de lo que no sabemos, tenemos lo único comprobable, que es su silencio cómplice. Alguna vez y como parte de la campaña electoral de las legislativas de 2005, que en la provincia enfrentó a Cristina Kirchner con Hilda “Chiche” Duhalde, Fernández amenazó ante la prensa con contar “todo lo que sabía” respecto de aquella jornada de junio de 2002.

El pasado fin de semana Fernández cerró el encuentro “Bloggeros Nac & Pop”. ¿Se habrá acordado alguien de preguntarle allí al jefe de Gabinete que es lo que sabe y nunca contó?

Néstor Kirchner relacionó varias veces y en publico a aquel gobierno con las muertes. Quienes festejan hoy a Fernández le perdonan aquel silencio en base a su obsecuente y monolítico discurso de hoy. A favor del ex secretario, ex ministro y actual Jefe de Gabinete hay que decir que desarrolló una carrera en los más altos niveles del poder del estado en base a un acabado espíritu de autopreservación a prueba de todo. Quizás por eso despierta admiración entre los jóvenes K, varios de ellos ingresados en los últimos años al funcionariado, otros aspirantes y otros buenos aduladores.

Se festeja la dureza de la cara para borrarlo todo y seguir como si nada. Esas anibaladas del secretario de Duhalde festejan los jóvenes bloggers oficialistas, y algunos no tan jóvenes como Artemio López. Festejan los cuadros que les presta el neoliberalismo y el calorcito que tiran, se los festeja por izquierda, se les dicta. Se aplaude y venera a los únicos que saben y no dudan en hacerlo, aunque mañana salgan a matar bloggers para defender un puesto.

Prensa De Frente - El nuevo ídolo de los chicos: Aníbal Fernández

Me gustó esta columna así que decidí compartirla… como verán la fuente no es Clarín, ni Perfil, ni La Nación…

Buen aporte. Personaje complejo si lo hay, pieza fundamental para sostener el embate de los grandes medios contra el Gobierno. Piensen que fue el que le consiguió al ejecutivo el control sobre el Fútbol. Un verdadero estratega, hoy en día es el aparato propagandistico por excelencia de la presidencia, y creo que les ha servido y mucho desde que salió al aire FPT.

Interesante, y más interesantes aún los comentarios en la nota original, a los que adhiero 100%.

Ultimamente me da la sensacion que esta con bastante tiempo al pedo, se viene prendiendo en cada boludez. Primero con la Porota y ahora con la Granata.

Este tipo me parece sencillamente vomitivo. :evil:

Gracias por la nota. Conocía parte del prontuario de este hijo de puta, no sabía lo de la merca que encontraron en la Liga Federal. :evil:

Abrazos, Martín.

Anibal Fernandez va a ser uno de los que les va a restar votos al kirchnerismo, a la gente no le gusta los tipos que solo confrontan o se enojan cuando hacen una pregunta jodida, la gente quiere funcionarios que expliquen en forma diplomatica las cosas sin importar el tipo de pregunta que sea…

Fernandez es un resumen de lo que es el kirchnerismo ahora, soberbia pura, ademas ya se le salio un tornillo…

con esta nueva forma de hacer política que se ha instalado en el país en los últimos 3 años, esta manera de confrontar por todo, ahora cualquiera se cree con derecho a escrachar, decir lo que quiera sin importale si falta es respeto al otro, total, los de arriba lo hacen.

Es una verguza de parte de quienes nos gobiernan que acudan a esa manera de hacer política, de la oposición que nada hace al respecto salvo salir a decir giladas como “el gobierno confronta” pero nada serio por intentar cambiar las cosas como dar el ejemplo de trabajar humildemente y en silencio.

Cada vez vivimos más del circo de la realidad, se que no esta directamente relacionado al tema pero tenía ganas de decirlo… Tuve un ataque de no se que anoche cuando vi como escracharon a Hilda Molina en la feria del libro…

mafioso si los hay

Y participó en todos los gobiernos peronistas desde hace veinte años.

Un pejotista de ley.:smiley:

si los K son desplazados del gobierno en las proximas elecciones, habrá sido su ultima función de este sorete hdp en el estado, ya nadie lo convocaría, esta quemadísimo.
es un delincuente de la mas pura cepa peronista del conurbano.

Pará, una cosa es confrontar y otra muy diferente escrachar y utilizar la violencia en cualquiera de sus formas. El propio A. Fernández salió a condenar los escraches a los periodistas de Clarín.
Ahora bien, la política es consenso tanto como confrontación, no lo digo yo, lo dicen los entendidos en la materia. Y en este país con este estado de cosas, para cambiar algo, utilizar una forma confrontativa de hacer política es casi imprescindible. Salvo que no desees cambiar nada y dejar todo como tal como está, en ese caso podés hacer del “consenso” tu slogan y tu caballito de batalla. Mas de uno que se sienta crispado va a estar dispuesto a votarte…

Un buen kirchnerista: estuvo con Menem (y ahora lo mata), después con Duhalde (y ahora lo mata) y ahora con Kirchner.
Mañana estará con mongo aurelio y matará a Nestor, obviamente.

Totalmente, con ese discurso berreta del consenso, de evitar la confrontación a toda costa, de ocultar todo bajo la alfombra, terminan votando a tipos como Menem, como De La Rua, como Macri, que les rompen el culo, que se cagan en todos sus derechos, que los perjudican económica y socialmente, que les hipotecan el futuro, pero siempre con una sonrisa, con un discurso amigable, entonces no les molesta.

Lo contrario a consenso, creo yo, vendría ser autoritarismo. Y eso es lo que hace este Gobierno con el que no opina igual que él. Y también juega con su discurso berreta de “hacerle el juego a la derecha”. Así no se puede debatir. Es una guerra de sordos, donde el que tiene mejor festejador de chistes es el que gana.

No creo que la opción al consenso sea el autoritarismo, gata. Es imposible consensuar sectores que tienen intereses diametralmente opuestos. Me parece que necesariamente va a haber confrontación, y crispación, siempre que cualquier gobierno, del signo que sea, intente tocar intereses establecidos. Le pasó a Yrigoyen, le pasó a Perón, le pasó a Alfonsín, le pasó a Illia, y le va a pasar a Pino Solanas en caso de que llegue a la Rosada.

de acuerdo.el “consenso” me chupa bien las pelotas
hay que ser energico para iniciar transformaciones.de todas maneras eso ha decaido ya que antes Kirchner era mucho mas energico y confrontativo(y ademas se la hacian mejor las cosas )
hoy la presidenta se hace la victima y se hacen las cosas peor.
podra tener asesores o funcionarios que peleen pero es la misma presidenta la que debe hacerlo.

Es es el arte de la política, debatir con quienes piensan distinto. Y no me refiero a la derecha del Pro y De Narváez. Me refiero a buscar consenso con partidos progres (por llamarlos de alguna forma) pero en vez de eso, si no estás con ellos estás con los otros y no es así.

La campaña asquerosa que están haciendo contra Pino en 678 da pena.


¿De cuándo es esa tapa Max? ¡Es muy buena!

coincido